Esta fuente se encuentra en el cruce de las calles de Toledo, Arganzuela y Mira el Río Alta.
Símbolos
La fuentecilla era una de las fuentes más conocidas de Madrid. Data de 1816 y fue diseñada por Alfonso Rodríguez, quien también hizo la fuente Egipcia que se encuentra en el Retiro. La fuente se erigió como homenaje a Fernando VII cuando regresó a España desde el exilio francés.
En la parte inferior hay un pilón con grifos. Encima podemos ver un oso, de forma algo extraña o particular, y un dragón. Ambos animales se encuentran en el blasón de Madrid.
Podemos ver también la inscripción honorífica al rey Fernando VII. A la izquierda está el escudo de Madrid con el oso y el madroño y las siete estrellas. En el otro lado el escudo con el dragón.
En la parte superior se encuentra un león con dos globos terráqueos que simbolizan el poder de España. Es obra de Manuel Alvarez y, como ya hemos visto en otras ocasiones, el león simboliza a la monarquía española.
Parece ser que el agua de esta fuente era muy buena, por lo cual era frecuente lugar de reunión de todos los que venían a llenar sus jarras con ella.
La calles
La calle de Toledo era una calle eminentemente comercial, ya que era una entrada desde la ciudad de Toledo.
En cuanto a la calle de Arganzuela hay dos teoría, o quizás incluso más. Una dice que el origen del nombre está en un labrador llamado el Tío Daganzo y cuya hija era muy conocida en Madrid y era además amiga de la reina Isabel la Católica. La otra teoría se funda en que esta señorita era muy conocida en la ciudad, pero por motivos más erótico-festivos que por otra cosa. El hecho es que el nombre sí parece venir de Daganzo, que con el tiempo se convirtió en Arganzuela.
La calle de Mira al Río Alta debe su nombre a una riada que hubo en el Manzanares en 1439 y de las gentes que, al parecer, no dejaban de gritar «Mira el río».
Este artículo fue escrito hace más de 5 años, por lo que los datos pueden estar desactualizados.